Este año 2025 se vivió un particular fenómeno en las dependencias del Ministerio de las Culturas, específicamente en las instalaciones que corresponden a Centex en Valparaíso, donde un grupo humano gestiona, produce y organiza con amor un sin número de iniciativas con la comunidad.

Una de ellas fue la reactivación de varios clues que, bajo el alero cariñoso de las dependencias de Centex en Sotomayor 233, Valparaíso, organizaron a grupos humanos autogestionados que se unieron en torno a las letras, al tejido, entre otros, ver nota anterior.

Uno de estos grupos fue Té de Letras, club literario: agrupación que existe desde enero de este año, compuesto por un grupo heterogéneo e intergeneracional. Concebido como un espacio abierto para las personas con interés en explorar su creatividad a través de la escritura y las artes en general. Se reúnen todos los miércoles, libre y voluntariamente de 17 a 19 hrs.

Fue tal la motivación y el impulso de este grupo que, en el papel están coordinados por Cristóbal Racordon del área de Mediación de Centex pero que en la práctica funcionan como un grupo horizontal donde todos dirigen, que se embarcaron en un gran proyecto que solitos gestionarían: editar e imprimir un libro. Así nace Florilegio, primera publicación impresa de Té de Letras que contiene poemas y relatos de 12 participantes, que escriben acerca del ciclo de la vida como tema articulador de este libro.

Para conocer más acerca de esta iniciativa conversamos con Mayra (con guitarra en las imágenes) una de las integrantes de Té de Letras, quien gentilmente accedió a responder algunas preguntas para conocer mejor a este Club y empaparnos de su alta motivación.

¿Cómo nació crear el Club Té de Letras?

Té de Letras se constituye a partir de un pequeño grupo de personas que quedó del Taller «Frutos de Temporada» que se realizó en Centex el año 2024, exactamente el día miércoles 27 de noviembre. El miércoles 8 de enero, se reúne por primera vez este grupo y se considera esta como la primera sesión del Club, que aún no definía su nombre. El día miércoles 12 de marzo se determina que «Té de Letras» será el nombre formal del club y que se reunirá todos los miércoles de 17:00 a 19:00 hrs. en las dependencias del Centex, y el 1 de abril, por primera vez, aparece en la cartelera mensual del mismo espacio cultural.

¿Quiénes lo componen?

El Club es de convocatoria abierta, es decir, cualquier persona que desee asistir puede hacerlo. Actualmente hay alrededor de 15 miembros regulares, que asisten frecuentemente, y unos 7 que vienen de vez en cuando o interactúan con el club por redes sociales. El libro Florilegio recopila textos de 12 de los integrantes, quienes asistimos a todas las sesiones y cuyos miembros se han mantenido desde principio de año. Dentro de este grupo, hay personas jóvenes estudiantes, como Gabriel que tiene 19 años y personas mayores como Adela, Héctor, Mauricio y Clara, que tiene 81 años. Es una comunidad intergeneracional bastante diversa.

¿Cómo nació la idea de hacer el libro?¿Cómo lo financiaron?

La idea surgió a propósito de una plaquette que se imprimió para el día del libro. Se pensó hacer una reimpresión de la plaquette, que eran solo hojas carta corcheteadas, bastante simple, pero luego, y al considerar que dentro del grupo hay perfiles bastante talentosos y multifacéticos, pensamos en que nosotros mismos podíamos hacernos cargo de editar y corregir los textos, diseñar la portada y planificar un lanzamiento, solo había que ver el tema de la impresión del libro con una imprenta local que fuera relativamente económica. Cristóbal, que ya había trabajado con varias imprentas locales por el vínculo con Centex, nos dio el dato de Serigrafía Cajilla, quien nos hizo un presupuesto adecuado para lo que estábamos buscando. Para conseguir el dinero, recurrimos a la Mesa Ciudadana del Libro y la Lectura, que este año se activó en la región gracias al Plan Nacional de la Lectura, Escritura y Oralidad, que forma parte de la Ley del Libro y se encuentra presente en todas las regiones del país. Este tiene una línea específica de «Clubes de lectura», fomento y fortalecimiento de los mismos, por lo que se presentó como un proyecto a través de la Mesa, y al solicitar un monto relativamente bajo para la propuesta y que cumplía con ciertos parámetros de inclusión, intergeneracionalidad, diversidad y territorio, fue aprobado rápidamente. Con eso pudimos financiar la impresión del Florilegio. Todo lo demás fue realizado por los mismos integrantes.

¿Qué contiene Florilegio?

El Florilegio reúne escritos de 12 integrantes del club. Estos escritos responden a una temática: el ciclo de la vida, tema que fue determinado por los mismos integrantes, al tratar de encontrar un eje común que nos identificara a todos como seres humanos, seres vivos de esta tierra. Se habla del nacimiento, de las etapas y experiencias de vida, de la muerte y de las sensaciones y sentimientos que abordan estos mismos procesos. La idea es que todas las personas que lean el libro – al igual que nosotros- puedan conectar e identificarse con al menos uno de los textos, y con esto dar cuenta que los seres humanos tenemos más en común de lo que pensamos, y que nos encontramos conectados y unidos en estas mismas experiencias (relevando esto por sobre la segregación y marginación que predomina en el discurso político actual). Además, cada autor se presenta con una especie de «autorretrato» o «semblanza» en donde se reconoce a sí mismo/a y se presenta al público, y que va acompañado con una ilustración que lo representa, realizada por otro autor/a del Florilegio. Esta publicación saca a relucir todo el talento que existe en el grupo, destacando naturalmente, al ilustrador Nicolás Huerta, quien hizo la portada de la publicación y que considera la temática de la vida y la muerte en la estética.

Agradecemos enormemente el apoyo de todas las personas que nos acompañaron en el proceso, que asistieron al lanzamiento y que de alguna u otra manera creen en los proyectos colaborativos en torno al arte y la cultura, sabiendo que, muchas veces no es dinero lo que se necesita para levantar una idea, iniciativa o causa, a veces solo basta con tener una comunidad motivada, que crea que la educación y el arte pueden transformar la sociedad y cuyo interés no se define lo monetario y la ganancia personal, sino que radica en la cooperación, la buena voluntad y la creación desde lo colectivo.

Fotos del lanzamiento del libro en el lente de José Veas @joseveastapia