El uso de tiempos irregulares en la cueca, que se reflejan en composiciones realizadas en once octavos, es parte de las características que se pueden encontrar en la nueva apuesta de la compositora nacional, «Cuecas para no Bailar».

El pasado fin de semana, la talentosa artista Daniela Sepúlveda, conocida en el mundo artístico como La Charawilla, se encontró con su público en Centex para presentar su nuevo disco titulado «Cuecas para no Bailar». Este innovador trabajo musical es una apuesta que transita de lo campesino a lo urbano, desafiando las convenciones tradicionales del género.

Daniela Sepúlveda, reconocida payadora y cultora del guitarrón, el arpa chilena y la vihuela bastarda, ha logrado junto a su banda dar vida a «Cuecas para no Bailar», un proyecto que nace desde la libertad creativa y que explora sonidos más allá de los propios del campo. En este álbum, la artista porteña aborda el llamado baile nacional y el Canto a lo Poeta desde una perspectiva fresca y única, permitiéndole construir su propia identidad y posicionarse en el medio musical con una impronta distintiva y en esta oportunidad por primera vez con banda.

“Si bien estudié música, nunca pensé convertirme en la artista en la que me estoy transformando hoy” comentó Daniela ante la reciente presentación de su disco en Centex, a lo que añadió “ al igual que mi relación con la música que viene de lo circunstancial, tocar en Saberes Públicos era impensado, pero equipo centex guarda una calidez que me permitió sentirme en casa”.

La artista ha sabido fusionar lo tradicional con lo moderno, creando un puente sonoro que conecta las raíces campesinas con las vibraciones urbanas. Esta búsqueda de nuevas sonoridades y formas de expresión no solo resalta su versatilidad como músico, sino también su compromiso con la evolución y la innovación dentro del folclore chileno, “ Este disco no solo conlleva un pacto conmigo sino que viene  a dejar un legado a las futuras generaciones para que logren acceder a la sonoridad que tenían sus abuelos y abuelas”

Manuel Guerra coordinador del centro de extensión Centex manifestó: “ La importancia de la palabra tuvo un lugar de particular valoración esa noche, una herramienta muy utilizada en la construcción artística de la Charawilla y desde ese lugar tuvimos la oportunidad de disfrutar el concierto con la gente que lo pudo presenciar además en Conversaciones Improbables, se abrió un espacio de diálogo que siempre asoma detalles inusuales de los artistas”.

La presentación del disco «Cuecas para no Bailar» fue un evento lleno de emoción y energía, donde el público pudo conectar con la tradición del campo chileno mediante una experiencia musical fresca  y diversa; rock, cueca, guitarra traspuesta eléctrica con efectos además de una sonoridad que nos transporta a oriente con los aportes de la viola en algunas de sus obras. Cada tema del álbum refleja la maestría de Daniela Sepúlveda y su banda, quienes han sabido llevar la cueca y el canto a nuevos horizontes, desafiando las expectativas y enriqueciendo el panorama musical con su propuesta única.

Sin duda, «Cuecas para no Bailar» es una invitación a redescubrir la cueca y el Canto a lo Poeta desde una perspectiva renovada y auténtica. Un disco que no solo invita a escuchar, sino también a reflexionar sobre la libertad artística y la capacidad de reinventar nuestras tradiciones culturales. 

Revisa las fotos de Francisca González

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